Sigue Rockeando!

lunes, octubre 26, 2009

Glup!

Recuerdo que cuando era niño lo único que podía calmar mis ganas de jugar y andar brincoteando por toda la casa de mis padres era, o un golpe provocado por una caída, o un grito de mi madre amenazando darme una cachetada o un "cinturonazo" sino me ponía a hacer lo que debía hacer, en ese entonces, mis tareas.

Siempre buscando algo para jugar. Imaginando que era un gran atleta o que andaba compitiendo contra Carlos Hermosillo y le metía varios goles al "brodi" Jorge Campos. O bien anhelando hacer una clavada en la cancha de basquet "in your face" entrenando con mis polainas de 2 kilogramos de peso.

Poco a poco crecí (mas a los lados que lo que hubiera querido) y esa energía fue menguando cada vez más, al punto de que ahora mi rutina diaria está enfrascada entre un asiento de automovil, camión, comedor o un sillón en casa. Esto reflexionaba yo al momento que recordaba las grandes distancias que caminaba antes de tener un auto que me "facilitara" la vida y me evitara las largas y agotantes caminatas bajo el sol de medio día sin un peso en mi bolsa para comprar una refrescante coca...

¿Y por que digo todo esto?

Sencillo. Si no pongo un remedio a esta situación pronto, las energías y ganas de vivir de mi hija me van a rebasar sin darme cuenta y voy a estar pidiendo auxilio aun antes de terminar el primer tiempo. Y el primer tiempo se termina en una semanaaa!!


¡¡GLUP!!

No hay comentarios.: